Es correcto, sentirse hermosa. Es una elección como cualquier otra, un poder personal que tenemos el derecho de asumir. Pero aún así hasta la más segura de nosotras puede encogerse al usar esa palabra. Ya sea porque pensamos que es un halago reservado a las modelos o porque pensamos que no cumplimos con los estándares, o nos preocupa el qué dirán, a todas nos pasa. Créenos, lo sabemos. Hemos dado la vuelta al mundo para explorar nuestra relación con la belleza, la autoestima y la imagen propia. Es complicado.
Complicado y más o menos la misma historia en todos lados. Alrededor del mundo las mujeres no se sienten seguras con su propia belleza. ¿Cuántas mujeres nos han dicho que su apariencia les angustia? Prepárate para algunas cifras descepcionantes: 61% en Estados Unidos, 86% en China, 56% en la India (donde casi todas las mujeres estuvieron de acuerdo en que toda mujer tiene algo hermoso, pero frecuentemente no lo ven), un enorme 96% en el Reino Unido y 72% en Brasil. Esos son muchos números altos que consideramos deberían ser mucho más bajos.
Pero nos hemos dado cuenta de algo. No tenemos que esperar a una nueva tendencia, revista o persona que nos de permiso de comenzar a sentirnos bellas. Somos mujeres. Tenemos poder. Podemos escoger la belleza por nosotras mismas. No es un derecho más que nuestro.