• 1
    Disfruta el viaje.

    Si bien ser padre puede ser agotador y estresante, las recompensas valen la pena. Craig, papá de un recién nacido, dice: "Ser papá es más difícil de lo que esperaba, pero también es más satisfactorio de lo que nunca me hubiera imaginado. No siempre es fácil, pero la recompensa que recibes es que puedes darle la bienvenida a una nueva persona a tu familia". Y todos los días tienes la oportunidad de establecer vínculos, desde la hora del baño hasta los masajes para bebés

  • 2
    Vuelve a pensar en las cosas básicas para el recién nacido.

    En lugar de hacer una larga lista de productos básicos antes de  su nacimiento, siempre puedes esperar a que tu bebé ya esté aquí. Claro, un bebé recién nacido necesitará ropa y pañales de inmediato, pero hay muchas otras cosas que puedes esperar para comprar. "Nosotros compramos muchas cosas antes de que naciera, incluyendo cosas que pensamos que íbamos a necesitar pero que en realidad ni siquiera tocamos", dice Jenny, mamá de uno. "También hubo cosas que no compramos y que luego nos dimos cuenta de que nos hacían falta. Pero, en algunos casos, nuestros amigos y familiares nos las prestaron"

  • 3
    Confía en lo que haces.

    Hay muchos estilos de crianza y muchos consejos para los padres nuevos, pero recuerda que debes confiar en lo que haces. "Descubrimos que muchas personas están ansiosas por dar su opinión y esas opiniones son bastante fuertes", dice Cameron, papá de uno. "Tu instinto normalmente está en lo correcto"

  • 4

    Piensen en ustedes mismos.

    Cuando llegue tu bebé, rápidamente puede volverse en el centro de tu familia, pero es importante que uno no olvide cuidar de sí mismo. Necesitas tanto amor y apoyo como el nuevo miembro de tu familia, como continúa diciendo Cameron: "Yo sugeriría que los padres nuevos recuerden enfocarse en ellos mismos, en lugar de enfocarse solo en el bebé"

  • 5

    La consistencia es clave.

    Si bien cada padre tiene un estilo de crianza diferente, pronto descubrirás que te ajustarás a tu propia rutina. "A los bebés les ayuda mucho saber qué esperar y entender qué esperar", dice Laura, mamá de dos. "También me ayudó mucho como madre nueva". La hora del baño puede ser un buen momento para empezar una rutina y el resto de tu día puede ajustarse a partir de eso

  • 6

    Acepta los cambios de prioridades.

    Cuando tienes un recién nacido, tu vida cambia en un instante. Con esa nueva adición a tu familia, muchas tareas se moverán hacia abajo en la lista de prioridades para poder darle espacio a esa personita que acaba de llegar a tu vida. "Al final del día, siempre que tu bebé esté feliz y sano, eso es lo único que importa – las tareas de la casa pueden esperar", dice Sanchia, mamá de uno