SOS para el daño térmico: cinco formas de reparar y proteger tu cabello dañado por el calor

Los dispositivos de peinado usan calor para romper los enlaces de hidrógeno del cabello y reorganizar temporalmente su forma y textura. Para la mayoría de los tipos de cabello, bastan 175°C. Asegúarte siempre de que tu cabello esté completamente seco con secadora antes de plancharlo.

Es hora de empezar a usar un protector de calor. Nuestro Dove Style+Care Smooth and Shine Heat Protection Spray  funciona cubriendo las hebras con una capa invisible que absorbe el impacto del calor de tus dispositivos de peinado (en lugar de que lo haga la cutícula de tu cabello). Al mismo tiempo, permite que la plancha se deslice más fácilmente. Con su capa protectora intacta, el cabello se verá y se sentirá más fuerte y saludable.

La exposición al calor reseca el cabello, eliminando su humedad esencial y dejándolo más propenso a romperse y producir orzuela. Es importante usar el champú adecuado. Nuestro Dove Hair Therapy Rescue & Protect 0% Sulfates Shampoo  limpia suavemente y acondiciona sin eliminar los aceites esenciales.

Todos sabemos que nuestro acondicionador diario está diseñado para nutrir y reparar, pero ¿sabías que también puede aumentar la resistencia de tu cabello contra daños futuros? Nuestro Dove Rescue & Protect Serum + Conditioner contiene ceramidas y péptidos para nutrir los mechones frágiles y refuerza la capa lipídica protectora fundamental para el cabello, ayudándolo en la lucha contra el daño por calor.

La verdad es que el cabello dañado por calor no puede repararse por sí mismo, sin importar cuánto tiempo te olvides de las herramientas térmicas. Primero, debes protegerlo, además de nutrirlo con los productos adecuados para que se vea y se sienta saludable. Dove Breakage Remedy Shampoo and Conditioner están diseñados para ayudar con el quiebre y dejarlo con un aspecto más grueso, fuerte y saludable.