Desde el momento en que veas a tu recién nacido por primera vez, vas a dedicar mucho tiempo para que se conozcan. Todos los papás tienen una forma de desarrollar ese vínculo tan especial, puede ser charlando, cantando, acurrucándose juntos o incluso con un masaje frecuente.
El masaje para bebés tiene muchos beneficios. El tacto es una excelente forma de comunicarse con su chiquito antes de que pueda hablar. Como explica la enfermera pediátrica y mamá de dos, Tracey, "podés estar más atenta a lo que quiere tu bebé, porque te volvés mas consciente de su conducta y de cómo reacciona a todo".
Como los masajes son muy relajantes, a veces hasta pueden reducir el llanto. Diane, experta en Investigación y Desarrollo de Baby Dove y mamá de dos, también descubrió que los masajes alivian los cólicos de su hijo: "sentía el aire atrapado en el estómago, así que masajearlo y sacarle los gases, con un movimiento circular descendente especial".
